Actualmente no se entiende una empresa sin web, pero a su vez tampoco se entiende esta como una mera tarjeta de visita en la que el cliente accede a ella para recuperar un número de teléfono extraviado.
La relación que se plantea del cliente con la web ha de ser:
- Informativa. Principalmente direccionar al cliente a la información que solicita de manera inmediata, en la que se pueda ver una información que se modifica y actualiza para generar una curiosidad continuada en el usuario. La usuabilidad, en el acceso claro y sencillo a la misma debe repercutir en un esmero por mostrar la información de manera clara y accesible, buscando la comodidad del usuario en todo momento.
- Comercial. Ofrecer servicios y con ello conseguir contactos para materializar en presupuestos. O bien conseguir compras a través de tiendas online o portales que la proporcionen en todo momento.
- Interactiva. Crear una comunicación bidireccional con el usuario a través de los diferentes canales que puedan ir añadiéndose. Buscar una comunicación que sea continuada y prolongada en el tiempo son aspectos que se consiguen con las redes sociales, portales y chats.
Siempre con el objetivo y meta de conseguir visitas, que se conviertan en contactos y estos en clientes.
En cuanto a la publicidad, la inversión debe ser la necesaria para obtener resultados. La publicidad en general puede ser gratuita (SEO) o pagando (SEM) La primera es más costosa en tiempo y de resultados difíciles de cuantificar, la segunda se puede cuantificar y los resultados son medibles.
El contacto. Hay campañas en las que él % de contacto es muy amplio y en otras muy reducido. Estamos hablando de un interés del 1% al 6% de todas las visitas. Es un porcentaje muy pequeño con un margen muy amplio, pero siempre ha dependido de muchos factores, competencia, mercado, precios, diseño web, confianza y un sin fin de variables independientes difícilmente medibles si no se analiza correctamente.